martes, 17 de diciembre de 2013

St. Pauli F.C. de Hamburgo: Una hinchada que ondea la bandera pirata



 Camilla Galbiati

[Versión adaptada y traducida al castellano por la Redacción de El Libertario, en base al texto original publicado en A - rivista anarchica, # 383, octubre 2013]

¡Todavía hay rebeldes que enarbolan la Jolly Roger! Pero si usted quiere encontrarlos en las cristalinas aguas y playas del Caribe, olvídelo: tienen su reducto en un pintoresco distrito del puerto germano de Hamburgo.

El barrio de St. Pauli se encuentra al oeste de esa ciudad, con vistas al río Elba, y es parte del puerto. Sus embarcaderos, conocidos como los "St.Pauli-Landungsbrücken", alcanzan una longitud total de 700 metros. En el barrio se encuentra la entrada a la Alter Elbtunnel, un túnel bajo el río Elba, que con sus 426 metros permite el cruce subterráneo del estuario.

Como todas las ciudades portuarias, siempre ha acogido a marineros de distintas nacionalidades, que pasaban su tiempo vagando por el barrio para pasar un buen rato antes de que se cargasen las naves y tornaran a la mar, por lo que el distrito tiene reputación como centro de entretenimiento, siendo una de sus calles la Reeperbahn, la famosa calle en las luces rojas.

La población se formó en gran parte por los trabajadores portuarios y las condiciones de pobreza que caracterizaron la zona perduraron hasta los años de 1970. Hoy en día hay muchos estudiantes que viven en St. Pauli, especialmente atraídos por los bajos alquileres, lo que permite que el distrito mantenga una cierta vitalidad intelectual. A pocos pasos de la Reeperbahn se encuentra en una zona citadina conocida como la Heiligengeistfeld, famosa por su feria que tiene lugar tres veces al año con una duración total de seis meses; dentro de esta área se ubica el Millerntor-Stadion, escenario donde, cada dos semanas, se congrega la hueste pirata.

Pateando al balón y al fascismo

El St. Pauli nació en 1910, pero el verdadero punto de inflexión se produjo en los años 80. En esa época, el campo donde juega se mueve a la zona portuaria. Por otra parte, muchos antiguos residentes se trasladaron a zonas menos pobres de la ciudad, así que okupas, punks y artistas pasaron a habitar las numerosas casas abandonadas. Pronto, el estadio se convirtió en un lugar de reunión para los residentes locales que comenzaron a apoyar al club de fútbol St. Pauli agitando la bandera Jolly Roger con el cráneo y las tibias cruzadas. La leyenda dice que la enseña pirata fue adoptada por los partidarios después de una broma hecha a los jugadores por un grupo de ocupantes ilegales, y desde entonces la bandera negra nunca ha dejado de agitarse no sólo en los partidos, sino también como símbolo de identidad del barrio.

A partir de allí, la primera acción del club y los aficionados fue cerrar las puertas del estadio para los "fans" de la extrema derecha. El fascismo, el racismo y el sexismo no se toleran dentro del estadio ni en las calles del barrio, donde una gran pared acoge un graffiti que proclama la consigna "Kein mensch ist ilegal", "Ninguna persona es ilegal". Lo que da vida al St. Pauli no es sólo una fe futbolística, sino una verdadera filosofía, como lo demuestra la modalidad de gestión del club, casi única en Europa. Debemos recordar que el St. Pauli es un club deportivo que impulsa muchas actividades deportivas, como tenis de mesa, rugby y patinaje artístico de la mujer: la gestión de todas estas actividades está completamente en manos de los aficionados.


Cuando el jugador # 12 es el # 1


Hace unos veinte años, sus aficionados dieron a luz a Fanladen, la coordinación de clubes de seguidores, a raíz de la decisión de la dirección del equipo para construir un nuevo estadio en otra zona del distrito. Esto provocó numerosas protestas que impidieron la realización de ese proyecto. El Fanladen es totalmente independiente del club y tiene algo así como 14.000 aficionados asociados, de los cuales un millar de mujeres. De vez en cuando se invita a los representantes de los aficionados a reunirse para discutir las opciones económicas y políticas del club y para elegir al presidente y los directores. Además, el Consejo de Administración se reúne regularmente con el Fanladen, con clubes de seguidores y con las parroquianos de la taberna Jolly Roger, histórico local donde se reúnen los hinchas de la divisa.

Entre las decisiones tomadas por los fans hay algunas respecto a las cuales son intransigentes: no hacer ninguna clase de negocios con fabricantes de armas ni de tabaco, el nombre del campo (Millerntor-Stadion) no se puede vender, y, finalmente, 7-8 minutos antes del saque inicial, no se permite hacer publicidad en el interior del estadio, ya que este tiempo será utilizado por la hinchada para crear atmósfera. En resumen, el fan de St. Pauli merece y recibe una atención especial, como nos muestra el último proyecto desarrollado por la afición junto al club: la creación de un espacio dentro del Millerntor llamado Fanraume, que podría convertirse en "un punto de encuentro, un centro comunitario en el interior del estadio", para citar las palabras del vicepresidente George Spies.

Una afición que sabe cuándo pasar a la acción

El St. Pauli, con sus 20 mil asociados, lleva a cabo importantes acciones sociales dentro del vecindario. En primer lugar ofrece lecciones semanales de fútbol para los niños, dirigida principalmente a la población  en situación socio-económica más vulnerable. También hace un par de años abrió una guardería llamada "Nido de Piratas", que recibe todos los días a un centenar de niños de 0 a 6 años. El servicio está disponible incluso durante los partidos, por lo que los aficionados podrán dejar a sus hijos durante unas horas: situación poco frecuente, porque el club tiene un gran número de pequeños partidarios que se agolpan en las gradas junto con mamá y papá.

Lo anterior también fue una de las cuestiones que llevaron a la gente a protestar energicamente cuando el rico propietario del Susis Show Bar, famoso local de baile erótico en Hamburgo, alquiló un "box" (espacio reservado) dentro del estadio donde irían " sus" strippers a actuar para los secuaces que él invitase a "ver" el partido. Esta fue la respuesta de la afición pirata: "Les pedimos que cancelen el contrato con el club de striptease Susis Bar Show [ ... ]. Si, queridos directores del club, Ustedes no actúan de acuerdo a nuestras demandas, vamos a entrar en resistencia abierta, vamos a ser el palo que tranque la rueda". Esta declaración pública demuestra lo importante que para esta afición es el anti-sexismo, nada extraño considerando el número de mujeres entre quienes siguen al club. Por ello los y las piratas se han manifestado abiertamente en contra de la mercantilización del cuerpo femenino, con la promesa de crearle problemas al St. Pauli si hubiera mantenido ese denigrante contrato.

Un lugar simbólico para el barrio es el Jolly Roger, punto de encuentro para los aficionados, que llegó a las noticias por los muchos ataques sufridos a manos de la extrema derecha. El más llamativo sucedió en 2011: cerca de la medianoche del dia antes al derby St. Pauli vs. Hvs, más conocido como "los primos ricos del Hamburgo", una columna de 200 hooligans recorrió sin ningún obstáculo las calles que llevan desde Hans-Albers-Platz al Jolly Roger. En ese momento en que el local es agredido con gran violencia los piratas responden al ataque, aunque luego deciden retirarse para evitar más daños a los comercios y viviendas de la zona. Los neo-nazis han sido capaces de atacar el Jolly Roger impunemente a pesar de que hay una sede policial a unos pocos cientos de metros del pub. Pero agresiones como esa no quedan en el olvido, pues según informa la página web de hinchas genoveses del St. Pauli: "Para los partidarios de St. Pauli, esto significa que la protección de las tiendas y las edificaciones del barrio debe ser y será organizada de manera independiente de la garantía supuestamente constituida por la policía. Una policía sobre la que es ahora necesario abrir una investigación que revele las razones de esa conducta extravagante, por así decirlo, para los estándares de transparencia operativa que debe seguir un servicio público tan delicado".

Con ritmo y con aliento

No se puede pasar por alto el vínculo que el St. Pauli tiene con la música y recordarlo con las palabras un fan absoluto, Colin Abrahall (cantante de los Gbh, conocido grupo punk británico de la segunda ola del punk de los 80): "St. Pauli es un club de fútbol punk rock". De hecho, el enfoque tradicional de los aficionados para recaudar fondos es organizando conciertos de música punk-rock no sólo en locales del vecindario, sino también en el propio estadio, como ocurrió en el verano de 2010, cuando el Millerntor se llenó con 22 mil personas en la celebración del aniversario del centenario del equipo.

Pero el compromiso social y político del St. Pauli está siempre en primer lugar. En 2011, sobre las tribunas del Millerntor se exhibe una pancarta que decía : "St. Pauli está con la preservación de las montañas. ¡No TAV!" (TAV = Tren de Alta Velocidad). El 16 de marzo de 2013, en Berlín se organizó un partido entre el FC Union Berlin y el FC St. Pauli, allí, en recuerdo a la más reciente víctima de los nazis, los fans de St. Pauli llevaban un letrero que decía: "¡Dax vive! Asesinado por ser militante antifascista". Por último, una de las últimas acciones de los piratas, apenas unos meses atras, es haber expuesto durante un partido pancartas en contra de la homofobia, acompañadas de una gran cantidad de banderas con los colores del arco iris, expuestas con el slogan: “It's ok to be gay” ("No está mal ser gay").

En un momento en que muchos mensajes reaccionarios y de ultraderecha aparecen en los estadios, los fans de St. Pauli, alemanes rebeldes, son un ejemplo que debe ser seguido tanto en el fútbol europeo como en el resto del mundo.

Un equipo que ha jugado pocas veces en la Bundesliga (1ra. división), incluyendo apenas un par de temporadas en el nuevo milenio (2001/2002, 2010/2011), cada vez con descenso a la temporada siguiente, afrontando el riesgo de quiebra varias veces y logrando recuperarse con la ayuda de sus fans. Un equipo sin grandes jugadores, pero que fue capaz de hacer que el estadio recuperase para el vecindario la función de lugar de encuentro natural y de integración para crear solidaridad, ayuda y apoyo a los pobres y los marginados, que valientemente cerró las puertas de su estadio al fascismo, la homofobia, el racismo y el sexismo como el que se tolera en tantos otros campos de juego. Por ello, no nos queda más que animarles al grito de ¡piratas, al abordaje!...



REMEDIOS VARO - PINTORA ANARQUISTA



El 16 de diciembre de 1908 nace en Inglés (Selva, Cataluña) la pintora anarquista María de los Remedios Varo y Uranga. Hija de un ingeniero hidráulico librepensador y esperantista andaluz (Rodrigo Varo y Cejalbo, natural de la cordobesa Cabra) y de una devotísima católica de origen vasco (Ignacia Uranga Bergareche, nacida en Panamá de Argentina). De pequeña mostró una inclinación natural por la pintura, que le servirá de escape en los colegios de monjas donde fue educada. Durante la infancia cambió a menudo de residencia, en función de los trabajos del padre (varias localidades peninsulares, Tánger, Casablanca, etc.). En 1924, cuando la familia se estableció definitivamente en Madrid, su padre la alentó, con el disgusto de su madre, a ingresar a la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, donde Salvador Dalí fue compañero de clase.

En 1930, al acabar los estudios, se casó en San Sebastián con el anarquista vasco Gerardo Lizárraga, que había sido compañero en la Academia, y la pareja se instaló en París durante un año. En 1932 se estableció en Barcelona, ​​donde ejerció junto con su compañero el oficio de dibujante publicitario y cartelista y frecuentó los círculos libertarios, especialmente el Sindicato de Dibujantes de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT). En 1935 se separó de Lizárraga y conocerá el pintor Esteban Francés, quien la introdujo en el círculo surrealista de André Breton. Más tarde, se integró en el grupo Logicofobista, que pretendía representar los estados mentales internos del alma, empleando formas sugerentes. Una obra de este período será El agente double (1936). Durante la Guerra Civil española se acercó aún más al movimiento anarquista ya través de este conoció el poeta Benjamin Péret - quien luchó en marzo de 1937 en el frente de Aragón, en Pina de Ebro, encuadrado en la "Columna Durruti" - -, con quien estableció una relación amorosa y con quien se fue por segunda vez en París.

En 1940 participó con su cuadro Recuerdo de la Walker (1938) en la Exposición Internacional Surrealista de la Galería de Arte Mexicano y ese mismo año obtuvo el primer premio en el Primer Salón de Pintura Femenina de México. En 1941, la pareja abandonó la Francia ocupada por las tropas nazis, tras pasar por un campo de internamiento del Gobierno de Vichy, y emigró a México ayudada por Varian Fry. En 1947 se separó de Benjamin Peret, quien regresó a París, y ese mismo año viajó a Venezuela integrada en una expedición científica del Instituto Francés de América Latina como ilustradora entomológica. En Venezuela continuó trabajando como cartelista publicitaria (Bayer, etc.) Y trabajó durante un corto periodo para el Instituto de Malariologia venezolano. En 1949 volvió a México, donde continuó su labor de ilustradora publicitaria. En 1952 se casó con el refugiado político austriaco Walter Gruen, con quien permaneció hasta el final de sus días. Animada por Gruen dejó la publicidad y se consagró exclusivamente a la pintura. En 1955 participó en una exposición colectiva en la galería Diana de la Ciudad de México, luego vendrían las exposiciones individuales, la cuarta y última en la Galería Juan Martín en 1962. En 1964 le fue dedicada una gran exposición retrospectiva de homenaje en el Palacio de Bellas Artes de México. Casi toda su obra es a colecciones particulares y museos americanos, sobre todo mexicanos.

En el país azteca hizo amistad con Frida Kahlo y Diego Rivera, pero se hizo más con artistas más allegados al movimiento libertario, como la pintora surrealista Leonara Carrington, Octavio Paz, Gunther Gerzso, y Kati y José Horna. Además de la obra pictórica escribió libros, como De Homo Ródano (1959), Consejos y recetas (1985, póstumo) y los inéditos Lady Milagro y Costumbres tropicales (con César Moro). Remedios Varo, considerada la introductora del surrealismo en México, murió de un paro cardiaco el 8 de octubre de 1968 en la Ciudad de México (México).




Imágenes:

1. Remedios Varo
2. El Flautista
3. El agente doble
4. Tejido de los sueños

viernes, 13 de diciembre de 2013

La autogestión como herramienta de construcción alternativa



El concepto de autogestión es reclamado por multitud de movimientos e ideologías, lo que vacía su contenido, como ocurre con la palabra democracia y otras palabras recuperadas por la ideología dominante
ENDIKA ALABORT AMUNDARAIN
MIEMBRO DEL ICEA
Es esa una de las razones de este artículo: centrar el debate desde premisas transformadoras. Vamos a tratar de entender el significado del mismo. Tomando la palabra en inglés, self-management o, más precisamente workers self-management, la definición es más concisa desde el punto de vista de la aclaración: centra la toma de decisiones en las personas afectadas. Es tan sencillo como esto, y esta es la razón de que el concepto de autogestión sea tan amplio, que abarque múltiples áreas haciendo que aún siendo la misma palabra tenga diferente significado según la persona que la cite. Ocurre algo similar con la palabra socialismo.

Entonces, cuando hablamos de autogestión… ¿qué nos viene a la mente? ¿Qué imagen? Autogestión y… salud. Cuerpo. Pueblo. Economía. Barrio. Clase. Enseñanza. Relaciones. Trabajo. Política. Sociedad… En cada una de ellas nos viene una imagen diferente. Por eso es importante cuando hablamos de autogestión, definir sobre qué estamos hablando.

Si tomamos el enfoque de herramienta de construcción de alternativas, debemos definir ante qué queremos construir esa alternativa. Y aquí hablamos de capitalismo.

1. Sobre capitalismo
No es la intención de este artículo buscar una definición extensa del mismo; utilizaremos una incompleta, pero útil para nuestro objetivo. En breves líneas, si hablamos de la toma de decisiones, es la propiedad la que decide y manda. La democracia queda limitada en el apartado político (si es que se puede considerar que haya), pero no en la toma de empresas, no en la economía. Como decían en los setenta, la democracia acaba a la puerta de las fábricas.

Es la mercantilización de las relaciones la que marca las pautas de producción y consumo, con su extensión al resto de ámbitos de la vida. Todo termina por pasar por caja, y es el que tiene el que decide, se es demanda si se tiene capacidad adquisitiva (gente dispuesta y con capacidad de pagar). Si no se tiene, no existe.

En el capitalismo, además de extraer plusvalía de la mano de obra, a la clase obrera también se le priva de decidir sobre aquello que les afecta, estando obligado a obedecer. Jerarquía, obedecer, no toma de decisiones, ejecutar… estamos hablando de una de las claves del capitalismo. ¿En qué ámbitos se da también este tipo de relaciones? Aparte de esto, este tipo de relaciones laborales ¿siempre es así? ¿Qué ocurre con los círculos de calidad y los equipos departamentales autogestionados? La clave está en la
motivación.

Al sistema no le es suficiente, y para aumentar esa plusvalía se han utilizado todas las vías posibles. Y una de ellas es la motivación, en la que uno de los elementos clave es la toma de decisiones. En el fondo es una aceptación parcial de un principio organizativo, sin asumir todas las consecuencias, con el objetivo de disminuir la conflictividad y absentismo, pero no para reconocer el derecho a controlar el trabajo por parte de las personas afectadas. Sólo podemos ver esto como pequeñas conquistas en las que no se pueden discutir la orientación general de la empresa. Concluyendo este apartado, la autogestión tiene desarrollos amplios. Ya hemos visto cómo desde el mismo sistema se apropia del concepto en su propio interés.

2. Las bases
Hay mucha literatura al respecto, por lo que en las siguientes líneas se van a esbozar unas directrices simplificadas de lo que podemos definir como autogestión. Podríamos incluir más elementos, pero estos ya son una simplificación bastante centrada.

La autogestión es un medio. Es una forma organizativa que facilita desarrollar plenamente las capacidades, y ser protagonistas y dueños de nuestra propia vida.

Implica someter a discusión no solamente cómo (se produce), sino también el qué. Poner sobre la mesa las necesidades individuales y las colectivas, someter a discusión cuáles son las necesidades. Esto implica conflicto.

El principio organizativo básico es la participación efectiva y constante de las personas implicadas. Ha de ser real y exige mecanismos de transparencia y toma de decisiones, evitando la discusión/división entre técnicos y el resto de la gente.

Se puede empezar a aplicar desde lo pequeño. Es complejo, pero hay formas de organizar la
economía (y sociedad) de forma autogestionaria: modelos federales y confederales, reforzando lo local como parte clave a la hora de tomar decisiones.

En un sistema funcionando bajo estos principios, las personas delegadas son más mandatarias que representantes, con una capacidad de decisión mínima, a no ser que la asamblea (o el foro donde se toman las decisiones) diga otra cosa, existiendo la obligatoriedad de rendir cuentas en público.

La clave está en la toma de decisiones en asamblea, entendida ésta como herramienta, sin confundir con el asamblearismo, posibilitando un espacio donde la gente pueda tomar sus propias decisiones.

La socialización de los conocimientos de los expertos e ir minorando el control de estos últimos es otro de los puntos fuertes, ya que la idea es que nadie sea imprescindible en un proyecto.

Para finalizar, la autogestión debe afectar a todos los ámbitos de la vida humana, logrando la configuración democrática de la vida social, y no solo económica. Esto nos lleva a plantear cuestiones como si cabe autogestión dentro del patriarcado, por ejemplo.

3. Resistencias y miedos
No existe nada perfecto, en todo hay dificultades. Las críticas son variadas, pero eso no quita la validez de las propuestas autogestionarias. Las más habituales suelen ser las siguientes:

Es poco eficaz y muy lento. La cuestión es si es negativo per se ser “lento” en la toma de decisiones; esa supuesta lentitud no tiene por qué ser así, dependiendo de cómo se organice la toma de decisiones.

Es irrealizable. La práctica dice que no. Aquí tenemos el ejemplo del cooperativismo, que no es perfecto, pero funciona. Si hablamos de presupuestos participativos, municipios autogestionados…, siempre han existido, hasta en épocas previas al capitalismo.

No hay interés en participar. En el caso de los movimientos sociales y políticos, sindicalismo, asociacionismo… ¿de dónde procede el absentismo? No es por la autogestión, sino que ejercer la libertad en el contexto actual es algo a lo que no estamos habituados: no se nace ni participando ni obedeciendo, eso se aprende.

No es un modelo organizativo rentable. Si atendemos al mundo económico, está en boga aplicar varios principios de la autogestión precisamente por eso, porque les puede aumentar los beneficios. Si nos centramos en la estructura de toma de decisiones, lo que falla no es el modelo, sino cómo lo ponemos en marcha.

Es frágil y complejo. Sí, como todo modelo, solo se puede fortalecer trabajándolo, es una apuesta.

Concluyendo este punto, se puede observar la potencialidad de la autogestión como herramienta trasformadora. ¿Qué puede aportar a los movimientos sociopolíticos que buscan una alternativa al sistema económico y social vigente? Esto es algo que debemos responder entre todos y todas.

4. Prácticas
Las prácticas son incontables, y se pueden estructurar por niveles: proyectos más micro y proyectos transformadores.

En los casos del segundo tipo, situaríamos las prácticas de la Comuna de París, los Soviets, los Consejos Obreros del Bienio Rojo, la Revolución de 1936-1939, la autogestión en Yugoslavia, Mayo del ’68 y la ocupación y recuperación de empresas… En este artículo nos vamos a centrar en los primeros, analizando el auzolana, ocupación y cooperativismo de manera breve.

El auzolana en Euskal Herria, l’andecha en Asturias, es un reflejo de la autoorganización popular. Es una puesta en común de cosas que hacer y llevarlas a cabo mediante apoyo mutuo, institución que a día de hoy sigue manteniéndose en los medios rurales. Tiene un fuerte componente autogestionario ya que organiza múltiples facetas del ámbito municipal sin la participación de la administración, satisfaciendo necesidades básicas de las personas a través del desarrollo comunitario.

La ocupación es otro término como la autogestión, tiene múltiples lecturas; aquí estaríamos hablando de la recuperación del espacio público sacándolo del mercado, cediendo ese espacio a proyectos que pueden tener base autoorganizativa, etc. Lo que realmente realza su potencialidad trasformadora es el jaque que puede hacer al sistema de propiedad capitalista, siendo esto una de las bases del capitalismo. En el fondo, si es trasformador o no, depende del objetivo que tenga y de los medios que se utilicen.

El cooperativismo es otro de los grandes en discordia. Estando su origen ligado al movimiento obrero y el sindicalismo, las críticas que se le han hecho desde el mismo movimiento han sido innumerables. Lo que no hay que perder de vista es que solo es un medio para recuperar la economía, ni más ni menos. Las grandes cuestiones vienen dadas por la relación con el mercado que ha de tener una  cooperativa, donde el ejemplo más claro lo tenemos con el Grupo Mondragón, en el que varias de sus cooperativas están actualmente en crisis.

5. Breves conclusiones
Una labor interesante se encuentra en analizar diferentes casos y ver la potencialidad autogestionaria, para extraer lecturas y tenerlas en cuenta en la mejora de los proyectos actuales y futuros. Ya que como decían, el camino solo se hace andando y errando…, y cuando hablamos de alternativas, más aún.

Fuente: Periódico CNT. No 406. Diciembre 2013. Pp 10-11


martes, 10 de diciembre de 2013

Los regantes: elite emergente regional?



Carlos Crespo Flores
2013

En un estudio sobre las elites en Cochabamba, el año 2005 (¿Pitaq kaypi kamachiq?: las estructuras de poder en Cochabamba, 1940-2006), José Gordillo, Alberto Rivera y Ana Sulcata, incluían a los regantes como una de las elites emergentes en el departamento, junto con transportistas y comerciantes, no solo por su importancia económica, sino por su capacidad de incidencia política.

Todavía se vivía la resaca de la guerra del agua (2000), momento de gesta de este sector productivo valluno; más aún, con la ley de agua potable (No 2066) y la ley de riego (No 2878) habían logrado proteger las fuentes de agua de posibles concesiones privadas, a través del reconocimiento de "sus derechos" de acceso y uso, los llamados "usos y costumbres"; en la autoridad nacional de riego (SENARI), el sector logró mayoría en el directorio; la opinión de Omar Fernández, entonces presidente de la Federación Departamental de Regantes de Cochabamba (FEDECOR) era tomada en cuenta por los que decidían sobre el agua en el departamento. Los regantes parecían tener control del agua, hoy convertido en un recurso estratégico.

Ocho años después no se puede sostener más esta afirmación, o por lo menos se la debe matizar. El cambio de uso del suelo a lo largo de la cuenca del rio Rocha, por tanto la reducción de tradicionales áreas agrícolas con riego en los valles cochabambinos, se ha traducido en la reducción física del número de personas dedicadas a la agricultura, expresado en la pérdida de importancia del sector en la economía regional y la seguridad alimentaria regional. El año 2010 el aporte del sector Agricultura, Silvicultura, Caza y Pesca al PIB regional solo llegaba al 8,8 por ciento, cuando en 1997 representaba el 15, 6 por ciento. La crisis de los regantes es la expresión de la crisis productiva y agroalimentaria de los valles cochabambinos.

Pero, es el conflicto de 5 salidas/Taquiña el que da evidencia de lo que afirmo. Luego de una crisis a principios de año que incluyó enfrentamientos entre regantes, asentamientos humanos, y entre medio la cervecería, por el acceso a las aguas de la cuenca Taquiña, finalmente en septiembre de este año se alcanzó un acuerdo, por el cual los asentamientos humanos reunidos en 5 Salidas recibirán 7.5 lts/seg. provenientes del sindicato agrario Taquiña (5 lts/seg) y de la misma empresa cervecera (2.5 lts./seg). Complementariamente la gobernación canalizará un estudio integral de la cuenca Taquiña, en cuanto a disponibilidad de agua y necesidades a satisfacer. Los barrios han salido ganadores del conflicto, porque los otros actores han tenido que ceder parte de sus "derechos de agua". El acuerdo evidencia la expansión de los asentamientos humanos en Chili Marka hacia Tiquipaya, justamente en zonas agrícolas tradicionales con riego. El año 2005 difícilmente íbamos a tener este acuerdo, primero porque había menos asentamientos, segundo, los regantes, a diferencia de hoy, tenían una organización fuerte y autónoma.

Y que ha pasado con la FEDECOR que hasta el 2005 hacía temer no solo con sus bloqueos y marchas, y mostraba una alta capacidad propositiva –la ley de riego fue elaborada por los liderazgos regantes y sus asesores-? Ha sido cooptada, neutralizada como acción colectiva autónoma, muchos de sus dirigentes se han convertido en funcionarios públicos. Y los nuevos sistemas de riego, aprobados en el marco del programa “Evo Cumple” o “Mi Agua”, tienen una estructura organizativa débil y están más ligados al poder corporativo de los sindicatos. Cada vez menos bases respaldan a la otrora poderosa institución regante.

Misicuni será otra prueba de la crisis que atraviesan los regantes. El 2014 no habrá agua del proyecto, eso está claro. Los regantes se movilizarán exigiendo la conclusión y transparencia del proyecto? Tendrán el físico y la libertad de movimiento para hacerlo? Lo dudo. Mi sospecha es que, como en 5 salidas/Taquiña, serán los barrios, los nuevos asentamientos, la zona sur que sigue esperando el agua desde el 2000, quienes saldrán a las calles nuevamente.